Procuraré que esta publicación sea lo menos formal posible, y desplegar mi emoción... que fue pertenecer a la prensa asistente a la feria del libro. Sacando un poco el trabajo, pude echarle un ojazo rapidín a los libros el primer día (la inauguración) disfrutar de cómo instalaban los stands y demás. Y como no puede faltar en mi vida, toparme con gente del pasado que te enseña a agradecerles. 👀🙌
Estos meses se me han ido volando, a partir de mis nuevas experiencias, he experimentado la felicidad y satisfacción del trabajo propio y fuertemente vinculado a tu responsabilidad.
Siempre creí que las responsabilidades para mí no eran demasiado fuertes y por eso tendía a flaquear demasiado fácil. Pero, no. Persistente señores!
Y por supuesto, mi outfit del día: Un vestido camisón negro, camisa de encaje, y accesorios de #Balú
Tacitas de Chavez, yo quiero una rosadita.
Muñequitos y algo de artesanía presente.
La feria estuvo bastante surtida, me agrada que no pierda su organización, aunque el tema de costos se vaya un poco de la mano. Es una de las fechas que espero con más cariño en el año en mi ciudad, disfrutar de la lectura sin ser tildada de nada. Porque es normal amar libros y empaparse de historias.
Fotos de Javier, mi compañerito de trabajo.
El decisivo, llevarse sus obras a la par de brazo y axila es la mejor sensación del mundo.
Aunque un empastado de Harry Potter cueste 69 millones, oh my. 🙈
